ACTIVIDADES ESENCIALES DISCRIMINATORIAS DE AMLO: #TRASLAVERDAD

El gobierno de la 4T utiliza distintos criterios en la aplicación de las acciones consideradas “esenciales” en este grave periodo de pandemia, considerado así por el Consejo de Salubridad General. A su favor son estimadas aquellas actividades consideradas “esenciales”,
El gobierno de la 4T utiliza distintos criterios en la aplicación de las acciones consideradas “esenciales” en este grave periodo de pandemia, considerado así por el Consejo de Salubridad General. A su favor son estimadas aquellas actividades consideradas “esenciales”,
durante el periodo que dure la pandemia del coronavirus, dejando en total desventaja a la sociedad civil, a la que priva de los mismos derechos. Por ejemplo, la medida tomada para que solo se produzca cemento para las obras del gobierno de la 4T, rompe sus criterios y reglas, viola el principio constitucional de la igualdad entre empresarios. El gobierno no está por encima de los ciudadanos, el gobierno sirve al pueblo. En el Decreto presidencial del 31 de abril pasado, no considera la producción de “cemento y acero” como actividad esencial, al menos no se alude en la lista de acciones que son estimadas como esenciales, solo estas deben prevalecer durante la contingencia sanitaria; el resto tiene que suspenderse. Las empresas productoras de cemento y acero que surten al gobierno que encabeza López Obrador, solo tienen permitido producir para el gobierno; el pueblo que se quede sin ese material, las empresas dedicadas a la venta del mismo material tienen prohibido hacerlo. Vamos, si “proletarios” estaban construyendo con muchos esfuerzos su casita, no les podrán vender ni podrán comprar ninguno de los 2 insumos. Pero, si el gobierno requiere toneladas para sus obras, como el aeropuerto, la refinería o el tren Maya, para ese sí hay miles de toneladas de material.
El riesgo que corre todo el personal que labora en la cadena productiva de cemento y acero, de contraer la enfermedad del coronavirus, no importa, total, puede ser reemplazable; lo que importa son las obras que no pueden suspenderse, estas no son reemplazables –criterio de López-, no pueden ser detenidas; en tanto que el resto de la industria de la construcción debe ser detenida, nada de trabajar, nada de construir, solo el gobierno está autorizado para ello. Vaya gobierno injusto, incurre en acciones por demás autoritarias fuera de la ley, en perjuicio de unos y en beneficio de otros. Cualquier juicio de amparo podría echar abajo esa “orden” del Presidente. El objetivo que conlleva el Decreto que ordenó suspender actividades, salvo las esenciales, no tiene excepciones en favor del gobierno y en contra o en perjuicio de la sociedad. La medida es extremadamente abusiva y sin sustento legal, solo el capricho de López Obrador, es el que sustenta la medida. Sobre todo, en cumplimiento de las órdenes del presidente, se pone en riesgo la salud de los miles de trabajadores de las empresas de cemento y acero ¿Qué sucederá cuando alguno de los trabajadores enferme y muera? ¿De quién será la responsabilidad criminal? ¡Del Presidente Andrés Manuel López Obrador! Quien arbitraria e inhumanamente privilegia sus obras por sobre la salud de los mexicanos. Esa acción es por demás criminal.
¿Acaso son compromisos inconfesables de López Obrador con los empresarios del ramo? ¿Les está pagando por la cancelación de la obra del aeropuerto de Texcoco? Vaya que son solo especulaciones, pero en el caso todo puede suceder. La simple lógica indica, sin embargo, que son más importantes las obras pública de Andrés Manuel, que la salud pública y vida de miles de mexicanos; no pasemos por alto que la pandemia se contagia exponencialmente. Este día la señora Claudia Sheimbaum, con rostro compungido, por medio de las redes sociales, endureció la orden de #QuedateEnCasa, para evitar mayores contagios masivos y que la enfermedad se siga expandiendo más en la Ciudad de México. El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, por su parte, hizo lo mismo -más temprano- aunque con otro rostro, mostrando seguridad y certeza en la toma de medidas más duras para que la ciudadanía cumpla con la “orden” de quedarse en casa, incluso propone bloquear carreteras en su Estado para que la gente no transite sin razón esencial que los obligue a salir de casa ¿Acaso pensó López Obrador que los trabajadores de esas empresas tienen que salir de casa, trasladarse hasta su lugar de trabajo y recorrer seguramente muchos kilómetros? ¿Durante el recorrido no hay contagios? ¡Por favor! Irresponsable conducta del Presidente de la República.
Frente a tanto desatino del Presidente, varios gobernadores están planteando la posibilidad de abandonar el pacto federal en materia fiscal, dada la irresponsabilidad en la distribución de los recursos públicos. La pandemia reclama millones de pesos para atenderla con eficacia y eficiencia y no hay más dinero; el gobierno federal ha preferido tomar dinero de la partida de seguridad pública, dejando a las policías debilitadas para hacer frente a la desatada delincuencia. El mismo López Obrador, había recortado la partida presupuestal en el sector salud, para destinarlo a sus obras. Por eso la urgencia por sacar dinero de donde sea posible; incluso dejando a los Estados con menos recursos públicos. Nada es más importante que continuar las obras prioritarias de Andrés Manuel, para esas no hay recortes de dinero ni suspensión de actividades; el jaloneo del dinero público ha repercutido en los ingresos de los Estado, en la repartición de la partida de los recursos federales. La molestia de los gobernadores que, con respeto se dirigen al Presidente, -así lo mencionó Enrique Alfaro- advierten sin embargo, que no están dispuestos a someterse a los caprichos del gobierno en detrimento de los gobiernos de los Estados, consecuentemente en perjuicio de los ciudadanos que viven en cada entidad federativa. Alfaro -incluso- mencionó todas las acciones que está llevando a cabo en pro de sus gobernados, lo que le ha implicado la aplicación de casi mil millones de pesos no presupuestados, en tanto que el gobierno federal prefiere destinar miles de millones de pesos en obras pública, desvalorando la salud de millones de mexicanos, frente a sus caprichos
¡Eso es criminal! Andrés Manuel López, arbitrariamente decide qué es y qué no es esencial durante el periodo de la pandemia, en detrimento de la salud y vida de millones de mexicanos ¡Conducta criminal!