La sociedad vuelve a manifestarse en contra de AMLO
Ayer domingo miles de mexicanas y mexicanos volvieron a tomar las calles en protesta por la nefasta política de descalificaciones y acoso permanente en contra de la SCJN y su ministra presidenta Norma Piña.
AMLO promotor de la violencia y la división. Depredador de instituciones que le estorban para sojuzgar y dominar al pueblo.
Al presidente López Obrador no le importa pisotear la Constitución y el Estado de Derecho, bajo el pretexto de su “cuarta transformación”. Una transformación que sólo ha generado caos, sin solución alguna a los problemas. Más bien, AMLO los ha agravado, siempre culpando a otros de sus torpezas y latrocinios. Molesto con las resoluciones de la SCJN que no le favorecen, siendo evidentemente inconstitucionales, razón que lleva a esos actos a declarar su nulidad absoluta; vamos, decretar la inconstitucionalidad. Es evidente que la ilegalidad es el soporte de las acciones la cuarta transformación.
La gobernadora de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, intentó boicotear la marcha ocupando la plancha del Monumento a la Revolución con eventos de entretenimiento. No le funcionó, los manifestantes se fueron de largo hasta llegar a Palacio Nacional y a las afueras de las oficinas de la SCJN, ubicadas a un lado de la casa que habita López Obrador: Palacio Virreinal.
Una vez más fue evidente el rechazo social a los abusos del presidente López Obrador. Los manifestantes reclamaron respeto al INAI, a los ministros y a la SCJN. Lo mismo se replicó en varios estados en la República Mexicana
¡No al autoritarismo de AMLO!
Una vez que el enorme contingente de manifestantes llegó al Zócalo capitalino, muchos de ellos se encaminaron a la SCJN, en donde estaba una docena de “agresivos gritones” de la #4T; esos que han instalado un tianguis cual mercado de pulgas. Lugar en el que colocaron mantas alusivas a la ministra presidenta, agresivas, ofensivas, denigrantes. Los cobardes se replegaron, ahora sí, refugiándose en la puerta de entrada, amontonados cual “ratones mojados”.
Manifestantes ofendidos por tanta agresión hacia ministros y la SCJN, procedieron a desmantelar el “tianguis” morenista, en el que vendían toda clase de objetos alusivos a Morena y López Obrador; tianguis tolerado por las autoridades de la Ciudad de México. El ambulantaje de Morena, convertido en negocio de los “gritones”, bajo la protección de policías de la CDMX. La policía capitalina protegió a los morenistas. Ahora sí actuaron.
En días pasados, los mismos tianguistas, morenistas intolerantes y ofensivos, agredieron a gritos, puntapiés, manotazos al vehículo de uno de los ministros que llegaba a su lugar de trabajo; tuvo que echar reversa ante la fuerte agresividad de quienes estaban en plantón ¿Los elementos de la policía capitalina? ¿Los elementos de la Guardia Nacional? Nada hicieron en defensa de los agraviados, simples mirones. Estaban para proteger a los miembros del plantón, no para custodiar y proteger a los ministros y empleados del Poder Judicial. Órdenes superiores. Así trabajan los dos gobiernos morenistas; toleran los abusos, las agresiones, siempre y cuando sean miembros del movimiento de la #4T.
No hubo golpes, no hubo violencia, si acaso unos empujones entre gritones y manifestantes.
Aquellos se quejaban de intolerancia ¡Por favor! Así de cobardes. Importante que, ante la permisibilidad de las autoridades de la CDMX, los manifestantes hayan desmantelado el ilegal y agresivo tianguis político, el “mercadito” a las afueras de la Corte. Solo falta que denuncien y Sheinbaum impulse acciones penales con su “mastín” de la Fiscalía. Son capaces de eso y más.
Conclusión.
Debe quedarle bien claro a López Obrador, que el “pueblo se cansa de tanta pinche tranza”. Y las tranzas las cometen él, sus legisladores y los lacayos de su gobierno transformista en destrucción.
El pueblo ha demostrado que no se quedará cruzado de brazos frente a tantos abusos cometidos y tolerados por el mismo Presidente de la República. AMLO, promotor de la violencia.
Seguramente en la mañanera de este lunes, se quejará amargamente de la intolerancia de los manifestantes, los ofenderá, los descalificará y calumniará; incluso, al borde de las lágrimas se hará la víctima, cuando el verdadero delincuente es el mismo presidente, quien incita a la violencia constantemente.
Volvió a ganar la sociedad saliendo a las calles por miles, en protesta por los latrocinios de AMLO.
El pueblo no se dejará doblegar por los abusos de López Obrador.
Siempre han demostrado civilidad en las marchas pacíficas, pero indomables. Así hasta las elecciones del 2024. No al “Plan C” de López Obrador.
Total apoyo social a los impartidores de justicia, a la SCJN, al INAI, al INE (sin la morenista de Guadalupe Taddei) y demás instituciones democráticas.
¡Ya basta de tanto abuso del Presidente de la República!