La farsa de la revocacion de mandato.
Antes de iniciar la explicación de en qué consiste y por qué no voy a votar por la revocación de mandato del presidente de la república, Licenciado de 14 años Andrés Manuel López Obrador, les quiero recordar de quién está promoviendo este ejercicio desde su púlpito mañanero.
López es un ególatra, mentiroso, narcisista que nunca ha aceptado un resultado en contra y cuando pierde siempre clama fraude. Así lo hizo en 2006, así lo hizo en 2012, y a pesar de haber ganado en 2018 sigue atacando a las instituciones que lo llevaron al poder.
Es un personaje oscuro, que miente desde su púlpito mañanero y en el que no podemos confiar, porque sus intenciones no son honestas.
Habiendo dicho lo anterior, iniciemos el análisis de por qué es mala idea participar.
La consulta para revocar el mandato constitucional es un instrumento de repúblicas bananeras que sirve para lo que sirve y no sirve para lo que no sirve. Ya lo hizo Venezuela, ya lo hizo Ecuador y ya lo hizo Bolivia, todos en algún momento u otro alineados al foro de São Paulo.
En México se inició el proceso de recolección de firmas el año pasado concluyendo el 25 de Diciembre. El INE encontró que las diversas asociaciones vinculadas a Morena colectaron más de 3 millones de firmas de personas entre las que se encontraron firmas de personas muertas o que no habían firmado y de manera irregular alguien puso sus datos en la petición. Aún así el INE aceptó que el proceso continuara.
¿Qué sigue?
El 10 de Abril se abrirán 57,000 casillas electorales para responder la pregunta:
Quiere usted que se vaya al diablo López Obrador o quiere que deje de hacerse tonto por otros 3 años y se ponga a trabajar?
La ley marca que para que sea vinculatoria, deben de votar el 40% de las personas inscritas en el padrón electoral. A Enero de 2022 el padrón del INE constaba de 93,129,048 Ciudadanos, lo que quiere decir que para que sea considerada una victoria para el “Que se vaya” habrían de votar primero 37,251,619 personas en ese ejercicio democrático, lo cual se ve bastante improbable ya que para una elección intermedia, como la de 2021 el porcentaje de participación fue de cerca del 52%, en ese ejercicio los partidos políticos y el INE promocionaron todo el día todos los días salir a votar.
Para que gane el “Sí que se vaya” tiene que haber un total de 18,625,811 personas deberían de votar por esa opción. Hasta aquí todo va bien y todo suena lógico, los remito al segundo y tercer párrafo de mi texto para continuar leyendo y entendiendo las trampas de la revocación.
PRIMER ESCENARIO, votan más de 37,251,619 personas.
Sub-escenario 1. Gana el “Sí, que se vaya:
De inmediato entrarían demandas por parte de Morena, de personas que hayan votado por Morena para reclamar la no-retroactividad de la ley de revocación de mandato.
¿Qué es esto? Bien, el principio de no-retroactividad es una práctica jurídica que dice que no puedes aprobar una ley y aplicarla a algo o alguien que hizo algo antes de la aprobación de esa ley. La ley de revocación fue aprobada en Septiembre de 2021, López fue electo en 2018, cualquier votante de Morena podrá alegar que sus intereses han sido afectados porque el o ella habrían votado porque López gobernara de 2018 a 2024, esa demanda puede llegar a la SCJN que está copada por gente que AMLO ha puesto ahí y la revocación no procedería.
En caso de que López tuviera tantito honor y decidiera retirarse, Morena y sus partidos aliados dominan ambas cámaras y podría poner al Morenista de su confianza, López seguiría gobernando, ya no desde palacio pero desde Macuspana. Imaginen a un Adan Augusto, Claudia, Marcelo o cualquier persona leal a López que sea un títere de facto por el resto de los 3 años.
Cabe aclarar que de darse este caso, los mecanismos de separación del presidente por revocación de mandato no existen. Haciendo este proceso más complicado.
Sub Escenario 2. Gana el “No, que se quede”
Teniendo la mayoría de votos con una participación igual o mayor al 40% el ego de López se vería inflado a niveles nunca antes vistos. De inmediato tomaría esta votación como señal de que la gente aprueba al 100% lo que está haciendo y tomaría nuevos bríos para seguir empujando su agenda de destrucción del país.
¿Y cuál es esa agenda?
Destruir al INE y poner personas que solamente le sean leales a él y a Morena, desaparecer el INAI, estatizar la generación de energía eléctrica, desincentivar la inversión, etc. etc. etc.
Escucharíamos una y otra y otra vez que “la gente aprueba lo que estoy haciendo porque me ratificaron” “Estoy bien y los conservadores están mal” “la gente quiere que siga transformando el país” y “El pueblo bueno habló en las urnas”. Sería más de lo mismo con resultados peores.
SEGUNDO ESCENARIO
PRIMER ESCENARIO, votan menos de 37,251,619 personas.
Sub-escenario 3. Gana el “Sí, que se vaya":
Aunque lo ha dicho en reiteradas ocasiones en su mañanera, al no alcanzar el 40% de votación López con la mano en la cintura va a decir “Lo siento, la encuesta no es vinculatoria porque no se alcanzó el nivel de participación de 40%, por lo tanto me quedo otros 3 años”.
Ninguna demanda procedería porque la ley estaría del lado de López. Los que hubieran votado habrían perdido tiempo de su jornada dominical y se decepcionarían. López se radicalizaría pero perdería fuerza porque no un ejercicio fallido de revocación querría decir que él en realidad no es tan popular como él cree.
Sub-escenario 4. Gana el “No, que se quede”
López se queda porque una minoría del pueblo bueno se lo pidió, pero al no haber votado una inmensa mayoría por su ejercicio de revocación, y al no haberle pedido más de 18,625,812 personas que se quede el liderazgo de López se vería disminuido. Recuerden cuánto tiempo los fans de López han hablado de los 30,000,000 de votos que lo llevaron al poder. Esa historia de que tiene 70% de popularidad, de que todo México lo quiere y que cuenta con el apoyo popular caería hecha pedazos y no podría pasar (al menos fácilmente) las leyes que pretenden destruir con las instituciones que todavía quedan salvaguardando nuestra democracia.
Esta es la única razón por la cuál no voy a votar en la revocación de mandato, esta es la razón por la cuál ningún Mexicano con dos dedos de frente debería de salir a votar el 10 de Abril. Esta opción debilita a López. Cualquier otra opción, como he explicado aquí es o perder el tiempo o hacerle el juego para que mantenga su agenda destructiva.
¿No se les hace raro que una persona que por 18 años estuvo insistiendo un día sí y otro también en que él sería el mejor presidente de México ahora quiera poner en riesgo su puesto?
Si usted piensa votar por que López Obrador se vaya de la presidencia permítame hacerle un par de preguntas: ¿Usted confía en que López Obrador cumpla su palabra? ¿Usted confía en que de perder López deje la presidencia en paz y abandone su “Proyecto alternativo de nación”? ¿Usted cree que López Obrador y su partido aceptaría una derrota en las urnas? ¿Usted confía en que López no vaya a clamar fraude electoral como en 2006 y 2012? ¿Usted cree que no culparía a “La mafia del poder” y no aceptaría el resultado?
Tome en cuenta que si usted participa en la revocación de mandato, pierde México.