AMLO alegre por el derrumbe de las economías del mundo: #TRASLAVERDAD
Este sábado, el Presidente de la República, prácticamente se alegró por el deterioro de las economías del mundo, al referir que el brote del COVID-19 aceleró el “derrumbe de la economía neoliberal”.
Este sábado, el Presidente de la República, prácticamente se alegró por el deterioro de las economías del mundo, al referir que el brote del COVID-19 aceleró el “derrumbe de la economía neoliberal”.
Con datos del Fondo Monetario Internacional “en todos los casos hay recesión, en vez de crecimiento va a haber decrecimiento de la economía”. López Obrador reconoció que en México se han perdido 500 mil empleos, sin referir cuántas empresas han cerrado. En tanto que la Comisión de Salarios mínimos aseguraba que para finales del mes pasado se habrían perdido más de 700 mil empleos. De acuerdo a la Organización Internacional del Trabajo –OIT- se perderían al menos 195 millones de empleos, durante los 3 meses de la pandemia ¿Esto es el derrumbe de la economía neoliberal que alegra a López Obrador? No cabe duda que solo estando enfermo como el Presidente, se puede alegrar de tremenda desgracia, sobre todo que durante su gobierno de izquierda se hayan perdido más de medio millón de empleos.
Los 2 millones de empleos que prometió crear Amlo, seguirán esperando.
Análisis de expertos en economía, aseguran que mucho dependerá para que los países salgan pronto de la debacle económica causada por la pandemia –en México la inició antes el gobierno de la 4T, con el nulo crecimiento económico-, de las ayudas fiscales que implementen los gobiernos en favor de sus empresas y trabajadores. Medidas que hoy en día las aplican los gobiernos solidarios con su población, excepción hecha de Andrés Manuel, quien ha negado toda ayuda a los empresarios y trabajadores, bajo el absurdo pretexto de que no salvará a las empresas mexicanas, tampoco a sus trabajadores. Mientras el empleo se viene abajo, el gobierno de la 4T, implementa simples paliativos como prestamos a la palabra por 25 mil pesos por persona “empresaria” ¿Sabrá López Obrador para qué sirve esa cantidad? Seguro estoy cierto que no tienen ni la menor idea, siempre ha sido un parásito que vive a expensas de terceros, solo recordemos el orgullo con el que mostró su cartera vacía, desde el púlpito presidencial. La perene duda será ¿Quién lo ha mantenido durante tantos años sin trabajar? Por esa sencilla razón es que el Presidente se niega a brindar apoyos fiscales a los empresarios, no sabe lo que es producir con el esfuerzo del trabajo; mucho menos otorgar apoyos a este sector de la población para soportar el embate de la pandemia. Los Empresarios tuvieron que buscar apoyos de instituciones bancarias para conseguir préstamos y aún eso le molestó al resentido social de Andrés Manuel López. Dice un dicho popular: si no ayudas, no estorbes compadre.
Este día se llevó a cabo un Foro Nacional denominado: "El virus que paralizó al turismo”. Todos los exponentes sumamente preocupados por la situación, resaltando la falta de apoyos del gobierno federal, en la espera de que gobiernos estatales puedan intervenir para ayudar a la industria turística, dado que López Obrador, no se inmuta. Por supuesto evitaron mencionar el nombre del “depredador empresarial”. Todos aportando ideas para echar andar la industria una vez que pase la pandemia; industria que emplea a millones de trabajadores y engarza una enorme cadena de empleos, empresarios y trabajadores de todos los niveles, refiriendo desde las líneas aéreas hasta proveedores de alimentos, por supuesto los empleados de los hoteles, pasando por quienes hacen la limpieza hasta el gerente; restaurantes, diversiones, transportes y más. Industriales sin chimeneas que buscarán salir adelante sin el respaldo solidario del Presidente, quien más que aliado es su enemigo. Así lo ha reconocido el propio primer mandatario, una y mil veces y en esta ocasión no podían faltar las denostaciones al referir que se “derrumba la economía neoliberal”. Si así fuera, hasta este día no ha dado prueba alguna el Presidente de cuál es su “sistema económico” de su gobierno, salvo la distribución de dádivas y para ello necesita al empresario pequeño, mediano y grande, son quienes pagan los impuestos que él reparte a granel como limosnas sin crear un solo empleo; incluso, la construcción de sus obras estrella se financian con el dinero que los empresarios y trabajadores aportan por medio de las imposiciones fiscales o bien, por las donaciones que vergonzosamente pide a los dueños del capital.
Las contradicciones del Presidente no tienen rostro ni perfil ideológico de izquierda, más bien de un parásito que vive a expensas de otro.
Por lo pronto, pretendiendo levantar la economía con dádivas, López Obrador se alegra por haber dispersado tal cual virus, en calidad de “inversión” 3 mil, 131 millones de pesos, en 125 mil, 260 créditos a pequeñas empresas familiares. No demostrable por supuesto. Por cierto, el mismo número de oficios que ilegalmente distribuyó con su nombre impreso, medida propagandística que el INE le prohibió continuar repartiendo. También el estado de ánimo del Presidente es de felicidad y cómo no, si está salvando la economía de izquierda, al distribuir 7 mil, 594 millones de pesos más, en 303 mil créditos –sin comprobar-. Vaya manera de impulsar la economía, mientras que, en lo que va de este año se han perdido más de 700 mil empleos, según la Comisión Nacional de Salarios Mínimos. La estrategia económica nacional del López Obrador, si se le puede denominar así, es todo un fracaso, seguramente está pensando en una economía como la de Cuba, en donde el pueblo muere y si sobrevive, lo hace con migajas que distribuye el gobierno socialista.
¡Esa es la lucha de Andrés Manuel López Obrador! Empobrecer al pueblo, destruir la economía neoliberal y levantar una economía bananera socialista en la que haya la misma distribución de los ingresos: la pobreza.